En un año complicado, la asociación Llanero Solidario se prepara para seguir ayudando a las personas que lo necesitan, pero este año un poco más si cabe
Las personas que ya se encuentran en una situación de exclusión, sufren doblemente por la situación de pandemia
Estamos a las puertas del otoño, una de esas estacaciones-transición que hace de puente entre el seco y caluroso verano al un poco más húmedo y frío ivierno. Es una período que nos prepara poco a poco y nos adapta para que no nos llevemos una sorpresa y el frío nos pille en chanclas y camisa de manga corta. Además, la tierra pasa de las calamidades sufridas durante los meses de estío a una época más propicia, al no tener las escaseces e ir preparándose cual hormiguita para el siguiente año. Pues en Llanero Solidario también estamos este año un poco de hormiguitas.
“si en cualquier momento los servicios sociales son necesarios, en este momento lo son mucho más”
Este está siendo un año un tanto peculiar (por lo que sea) y pocas personas hay que no les haya afectado en menor o mayor grado la situación actual. Pero pase lo que pase, siempre hay personas que por circunstancias de la vida (ajenas o propias), se ven en situaciones de vulnerabilidad y que esto no hace más que agravar los problemas que ya tienen. Como decía Daniel Azaña, presidente de Llanero Solidario durante la visita de Aurelia Sánchez (consejera de Bienestar Social de JCCM) al proyecto llanero de Mahora, “si en cualquier momento los servicios sociales son necesarios, en este momento lo son mucho más”; porque no es lo mismo que llueva sobre una zona seca de antemano, que si bien es cierto el agua puede afectar negativamente al principio hasta que la tierra empiece a empaparse, a que lo haga sobre terreno ya mojado, porque aún no te ha dado tiempo a reponerte del perenne chaparrón.
A pesar de todos los contratiempos, la asociación se ha puesto manos a la obra (literalmente) para que pueda seguir ayudando a las personas que participan en sus proyectos y que les acompañan desde una formación pre-laboral, como es el caso de los proyectos Germina Empleo, Entre Costuras o Puntadas, Conecta Empleo o EcoNatural; pasando por una orientación y primer contacto con el mercado laboral en Recalculando; hasta llegar al último objetivo que es la inserción sociolaboral con el proyecto Incorpora de La Caixa. Además, y para disponer de una mayor autonomía logística, se está adaptando la sede para tener varias aulas y una nueva oficina en sus instalaciones. Como no podía ser de otra forma, construido de una manera aunque algo más lenta y pringosa de lo normal, pero eso sí, sostenible y respetando los valores de la asociación al utilizar barro y paja que, además de ser materiales fáciles de conseguir en el entorno de Albacete, sirven para una perfecta climatización. Esperamos estar preparadas para el invierno y que cada vez sea menos necesaria la intervención de asociaciones como la nuestra, porque eso querrá decir que que hay más igualdad social.